La palabra método proviene del griego y significa “el camino hacia”. El método es una estrategia para alcanzar un resultado. Permite solucionar problemas y resolver oportunidades; más que una técnica mecánica, es una ayuda para resolver una gama variada de problemas. Está dirigido a revisar y mejorar la eficacia de los diversos pasos en el proceso de diseño, y su objetivo no es proporcionar soluciones prefabricadas.
La creatividad posee algo de misterioso, azaroso e incontrolable, pero el proceso creativo es básicamente productivo como consecuencia de un proceso metódico.
El proceso de diseño comienza con una necesidad y finaliza con la verificación, en el uso, del objeto que le da respuesta. Avanza atravesando progresivos grados de certidumbre, a partir de la incertidumbre inicial. Paralelamente abarca grados de crecientes de generalidad, hasta llegar a su máxima definición en la concreción final.
Pasa por etapas que pueden transparentarse y por momentos de cerrada hermeticidad, lo que en la metodología de diseño se conoce como caja negra, es el momento del salto creativo. Una gran parte de la producción creativa está basada en la conexión, asociación, combinación de elementos que aparentemente son dispares, y no tienen nada que ver entre sí. Sin embargo, una vez creada asume un nuevo significado.
Si todavía no leíste mi libro Diseño de Identidad institucional editado por Eudeba, podés hacerlo acá: https://www.eudeba.com.ar/Papel/9789502325477/Dise%C3%B1o+de+identidad+institucional
Y si querés seguir la conversación y saber cómo te puedo ayudar escribime y hablamos msapoznik@expertoenmarcas.com.ar +54 9 11 4989 9393. Mi trabajo es ayudarte a tomar el control de tu marca ahora y para siempre.